La predicción del calendario maya del llamado "fin de los tiempos" sitúa esta fecha en el 21 de diciembre del 2012, tomando en cuenta un cálculo basado en su propia medición de tiempo y el resultado que finalmente colocaría este evento en ese ya multicitado día.
La única medición que apoya esta teoría es el cruce de nuestro sistema solar sobre el eje medio externo de la galaxia (situación que se repite cada 25794 años), es decir el total de un ciclo precesional. Esto supuestamente puede alterar la altura del eje terrestre respecto del ecuador. En tal sentido, se puede obtener información gráfica sobre este punto en: http://www.youtube.com/watch?v=0hxgR0wgDC4
Ahora, quienes estudiamos Judiciaria, tenemos sin embargo una visión escéptica respecto de ese tiempo por una sencilla razón astrológica: No existe durante ese momento una configuración de tal peso en el cielo que pueda conllevar un pronóstico de ese calibre.
Solamente los eventos provocados durante Setiembre del 2008 por la entrada de Plutón en Capricornio, reflotan el problema técnico de la sobrecarga de acontecimientos que se provocan durante el cambio de signo de uno o mas astros que correspondan de acuerdo al modelo teórico a ciertos factores que tienen un retorno sobre un mismo punto cada cierto período importante de tiempo.
En tal sentido de acuerdo a este estudio (mas desapasionado, en todo caso) entre el 20 y el 21 de marzo del 2011, hay suficientes cambios durante ese conjunto de horas (inicio del año zodiacal), que inclina a pensar que de sucederse eventos de un rango superior, éstos deben estar cercanos a esa fecha.
En la efeméride de ese día las coordenadas son las siguientes:
SOL en el 0 de Aries
Luna en paso por Libra
Mercurio y Venus en Aries y Acuario respectivamente
Marte a los 21 de Piscis
Júpiter a los 12 de Aries
Saturno a los 15 de Libra
URANO a los 0 de Aries
NEPTUNO A LOS 29 grados 30´ de Acuario
Plutón a los 7 de Capricornio
Es también cierto que Urano ya alcanza el 0 del Zodíaco meses antes y por retrogradación vuelve a Piscis, para volver a pasar sobre esta fecha. Tal vez entonces, la importancia radica en la combinatoria de los dos movimentos (Urano+Neptuno) que es lo que puede alterar fuertemente la composición del material astrológico de ese momento.
En este sentido, el conjunto de cambios durante esos días, mas el cercano cambio de Neptuno a Piscis, son los indicadores firmes en cuanto a alteraciones de diferente tipo y que por su importancia, pueden provocar acontecimientos generales de suficiente jerarquía para impactar el destino particular.
¿ Qué sucede entonces con los antecedentes ?
Un contraciclo (Urano en Aries y Neptuno en Virgo) sucede hacia 1929, con los históricos cambios sociales sobre las bases económicas del momento que si bien, dan pie a una nueva realidad, no extienden necesariamente su influencia hacia toda la Tierra en ese momento.
El último pasaje de Neptuno sobre Piscis es en 1850 y en este sentido la situación parece al menos, preocupante.
Durante este tiempo el electromagnetismo alrededor de la Tierra alcanzó un mínimo en su ciclo, lo que representó en aquel momento una alteración en el único equipo eléctrico que funcionaba organizadamente por pulso (el servicio telegráfico de los Estados Unidos).
El mínimo anterior (antecedente de Neptuno en Piscis) es en 1685, coincide con el llamado "mínimo de Maunder", que de paso es interesante para entender algunos aspectos del cambio climático: www.astrosurf.com/obsolar/colabora/minimo_maunder.pdf
Indudablemente si hoy, ese nuevo mínimo alterara el campo electromagnético, nuestra "dependencia eléctrica" alteraría fuertemente el ritmo normal de la existencia general (y particular).
En resumen, si un factor único como Plutón provocó alteraciones de grueso calibre en el sentido material, con el impacto social consecuente (Capricornio), el paso de Urano sobre Aries (desde el inicio de Marzo) y la entrada de Neptuno en Piscis (hacia el final de Abril), conforman un conjunto de semanas que implican mas probablemente acontecimientos a nivel general que los predichos para la fecha ya conocida.